Ya no se aceptan artículos para este año. Página en actualización.
Dra. Blondy Beatriz Canto Canche. Plantas vs., patógenos
Por: Dr. Luis A. Herbert-Doctor.
¿Quién es la doctora Blondy Canto Canché?
Soy esposa y mamá, tengo dos hijos, una hermana y soy una ciudadana Yucateca. Voy al súper, y muchas veces si veo algún ingrediente que no conozco, me acerco a preguntar cómo lo puedo preparar, para probarlo. Soy una persona sencilla. Me gustan los champiñones, me gusta la comida funcional, es decir, alimentos que tengan muchos pigmentos naturales. Soy de la idea de que mientras más colores tenga mi comida es más funcional.
¿Cuáles son sus gustos e intereses fuera del ámbito científico?
Me gusta leer. Leo mucho de mi tema de trabajo, pero cuando no se trata de lectura científica me gusta la lectura ligera de temas motivacionales. Me gusta ver programas de televisión como National Geographic y todos aquellos donde sienta que me puedo relajar y además puedo aprender. También me gustan las películas infantiles y aprendo mucho de ellas; me aprendo algunos lemas y luego los voy usando en mi día a día.
¿Cuál ha sido su mejor logro en la vida?
Esa es una pregunta realmente profunda. En mi caso es muy difícil definir un logro en particular. Siento que las personas tenemos muchos logros en nuestro día a día, pero si tuviera que definir alguno, sería haber terminado una carrera, después haber tenido la oportunidad de ser parte de un centro de investigación como el Centro de Investigación Científica de Yucatán, A.C. (CICY) en donde me siento muy afortunada de colaborar, de trabajar y de formar estudiantes y verlos crecer académicamente, para verlos convertirse en nuevos investigadores. Fuera del ámbito académico debo decir que quizá es haber logrado un balance entre el trabajo y mi familia, porque a veces como investigadores/as nos olvidamos de otras áreas de nuestra vida que también son importantes. Pero, quisiera pensar que el mejor logro, tanto para mí como para todos, está todavía a la vuelta. ¡El mejor logro es el que está por venir!
¿Cómo decidió dedicar su vida a la investigación?
Mi respuesta es diferente a la de muchos colegas que desde pequeños sintieron ese llamado para ser científicos. Yo sabía que existían los científicos, porque ellos generaban ese conocimiento que yo devoraba en libros, pero nunca sentí de pequeña ese llamado. Nunca tuve un microscopio o un juego de química, entonces, yo nunca sentí esa inquietud para investigar. No sabía a qué me quería dedicar después de terminar la licenciatura. De alguna manera me atraía saber cómo estaban hechas las células y las moléculas, pero no lo tenía claro. Cuando terminé la licenciatura, conocí a un investigador que estaba buscando un colaborador técnico, para trabajar en poliaminas, y la verdad es que tuve mucha suerte, porque el doctor le pregunto a sus estudiantes que sí conocían a alguien, y resulta que eran mis compañeras de la escuela y le dijeron mi nombre. El doctor me llamó, me invitó a conocer lo que estaba trabajando y me preguntó si me interesaba ingresar a su grupo como colaborador técnico; y dije que sí. Una vez que conocí de qué se trataba me enamoré del tema, y así es como empecé a hacer investigación. Actualmente, no me imagino haciendo otra cosa, amo lo que hago, pero tengo que reconocer que no era algo con lo que yo soñaba de pequeña.
¿Qué desafíos ha pasado para llegar al puesto que actualmente tiene como investigadora?
Algunos desafíos que he tenido que enfrentar, digamos que han sido consecuencia de mis propias decisiones, y así las asumo. Por ejemplo, yo comencé mi carrera de investigadora 10 años más grande que la mayoría de mis colegas y eso fue complicado. Yo era una joven investigadora porque estaba comenzando, pero no por la edad. Teóricamente, me tocaba competir con investigadores ya establecidos, entonces por eso fue bastante complicado conseguir mis primeros proyectos. Además, la mayoría de mis proyectos se enfocan en la frontera del conocimiento, y me decían que mis propuestas eran muy ambiciosas y que no tenía experiencia y eso podría comprometer la factibilidad de las mismas. Eso realmente fue un desafío. Pero, siendo persistente en el trabajo, las puertas se comenzaron a abrir.
¿Cuál es su línea de investigación actual?
En mi grupo de investigación empleamos las técnicas de análisis masivo, como la transcriptómica, metabolómica y genómica, para estudiar problemas agrícolas. Por muchos años hemos trabajado con una enfermedad de bananos y plátanos que se llama Sigatoka negra. Entonces, hemos estudiado al agente causal responsable de la enfermedad, un hongo que se llama Pseudocercospora fijiensis, que provoca daños en el banano y grandes pérdidas a los productores. Con el tiempo hemos estudiado a otros patógenos y sus efectores. Los efectores son generalmente proteínas que utilizan los microorganismos patógenos, para dominar a las plantas y enfermarlas. Es algo así como un partido de fútbol llenó de trampas. Imagina que los efectores son los jugadores del equipo del patógeno y quieren meterle gol a las moléculas que defienden al hospedero, o sea el equipo de la planta. Entonces, lo que hace el patógeno con sus efectores es etiquetar y bloquear a diferentes moléculas de la planta que son importantes para detectar al patógeno y activar la defensa contra el patógeno. Es como si los jugadores del patógeno le amarraran las manos o le taparan los ojos a los jugadores de la planta. Esto es lo que estamos estudiando, estamos identificando que efectores juegan los papeles más importantes para el proceso de infección.
¿Cuál es el beneficio social de su investigación?
Hace un par de años generamos un diagnóstico para detectar al causante de la Sigatoka de una manera temprana, a través de la tecnología de reacción en cadena de la polimerasa (PCR, por sus siglas en inglés). Esto permite detectar a este patógeno incluso antes de que nuestros ojos lo vean. Es muy similar a cuando nosotros nos enfermamos. Por ejemplo, cuando nos empezamos a sentir mal, el médico nos da un medicamento y podemos detener el curso de la enfermedad y así no nos enfermamos, pero si esperamos a que el patógeno nos colonice, podemos llegar a parar en el hospital. Lo mismo pasa con las plantas; si existe una detección temprana de la enfermedad se puede evitar llegar a condiciones críticas y, al igual que sucede con los seres humanos, es más fácil y más económico controlar la enfermedad cuando comienza, en comparación a cuando esperamos a que ya esté completamente desarrollada. Estos tipos de trabajos tienen un impacto tanto en el ambiente como en la economía, porque se requieren aplicar menos fungicidas.
En cuanto a la efectorómica, es un trabajo que apenas se empieza a desarrollar en México, somos muy pocos los efectorómicos/as y es muy pronto para hablar de los logros, pero definitivamente estamos dirigiendo la investigación de la parte básica a la parte aplicada. Es decir, no solamente estamos trabajando para identificar y entender los mecanismos de estos efectores; paralelamente estamos trabajando para convertirlos en bioproductos que les pueda servir a los productores de banano.
¿Considera que la divulgación científica es importante?
Definitivamente, es muy importante en dos sentidos. Tanto para divulgar lo que nosotros hacemos, para despertar la curiosidad y el interés en potenciales jóvenes investigadores, pero también para que nosotros como investigadores aprendamos. Definitivamente, más allá de lo que aprendemos en los artículos y de otros colegas, cuando salimos de los laboratorios podemos hablar con la gente y nos sensibilizamos de las necesidades de las personas. De esta manera orientamos mejor nuestras investigaciones. Por ejemplo, hace algunos años, trabajamos en un proyecto bastante grande y aprendí mucho saliendo al campo y trabajando con la gente y hablando con los productores, e incluso comenzó a ser parte de nuestra estrategia de trabajo.
Citar esta entrada como:
Herbert-Doctor L.A. (2022). Dra. Blondy Beatriz Canto Canché. Plantas vs., patógenos. 4(3), 8-10. También disponible en: https://www.cienciacakotanu.com/contenido/entrevistas/dra-blondy-beatriz-canto-canché
Dra. Blondy Beatriz Canto Canché I Doctora en Ciencias y Biotecnología de Plantas, por el Centro de Investigación Científica de Yucatán, A.C. (CICY). Actual investigadora titular C en el CICY.
Fecha de publicación en línea: 15 de agosto, 2024.