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Agavinas, carbohidratos no digeribles que promueven la salud
Dra. Ruth Esperanza Márquez López y Dra. Patricia Araceli Santiago-García.
Los agaves (Metl, en lengua Náhuatl) han sido fundamentales en la cultura y economía de México desde tiempos ancestrales. Para los Aztecas, estas plantas eran sagradas. Los agaves son plantas que tienen la habilidad de sobrevivir en condiciones de sequía. Sus raíces se expanden horizontalmente para captar agua de una mayor superficie. Otra de sus estrategias es la capacidad de almacenar grandes cantidades de este vital líquido en sus hojas. Además, sus hojas contienen unos poros llamados estomas, que la mayoría de las plantas mantienen abiertas durante el día para llevar a cabo la fotosíntesis, pero los agaves los mantienen cerrados durante el día para evitar la pérdida de agua por evaporación. Además, los agaves cuentan con compuestos de reserva energética, llamados agavinas que les ayudan a mantener su metabolismo activo durante periodos de sequía. Pero, ¿qué son estos compuestos? Las agavinas son carbohidratos de reserva formados por cadenas de unidades de azúcares conocidos como fructosa y glucosa.
Durante los periodos de sequía, la falta de agua puede causar cambios en la membrana que rodea cada célula de los agaves, comprometiendo su sobrevivencia. En ausencia de agua, las agavinas actúan como protectores de la membrana celular, ayudando a mantener su estructura y función, lo que convierte a los agaves en excelentes sobrevivientes de condiciones extremas.
Además de tener un papel fundamental en los agaves, las agavinas ofrecen importantes beneficios para la salud humana. ¡A diferencia del azúcar común de mesa, las agavinas son prebióticos! Es decir, alimento para las bacterias benéficas de nuestro colon, conocidas como Lactobacillus y Bifidobacterium. Además de esto, tienen otros beneficios. Por ejemplo, se ha comprobado que las agavinas de Agave potatorum Zucc., ayudan a reducir los niveles de glucosa en sangre, disminuyen la ingesta de alimentos, la ganancia de peso, e incrementan la producción de una hormona conocida como GLP-1, la cual está relacionada con el aumento de la saciedad; lo que ayuda a comer menos y controlar el sobrepeso. La hormona GLP-1 es responsable de manera importante de secretar la insulina, así que al incrementar GLP-1 por consumo de agavinas, también incrementa la secreción de insulina y, por lo tanto, los niveles de glucosa en sangre disminuyen. Otros estudios han reportado que las agavinas mejoran la absorción de minerales como el calcio, lo que podría prevenir la osteoporosis, una enfermedad que afecta la salud de nuestros huesos. Además, muestran gran potencial en la protección de las células cerebrales, un factor clave en la prevención de enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer y el Parkinson. Esto ofrece la posibilidad de que, al incluir agavinas en la dieta, disminuya el daño celular y mejore la calidad de vida de quienes padecen estas enfermedades.
Pero, seguro, te preguntarás: ¿cómo puedo consumir agavinas? Actualmente, existen productos en el mercado como los jarabes de agave que tienen agavinas y fructosa. Su sabor dulce las convierte en una opción para personas que desean controlar su ingesta de sacarosa (azúcar de mesa común). Otra forma de consumo, es en forma de fibra conocida como inulina de agave, la cual se puede utilizar como suplemento de diversos productos alimenticios (sustituto de grasa, yogur o productos de panadería), aportando ventajas en la textura y cremosidad sin afectar su sabor. Pero siempre el consumidor deberá revisar las etiquetas nutrimentales de estos productos. De esta manera, al elegir alimentos que contienen agavinas, no solo deleitamos nuestro paladar, sino que también apoyamos nuestra salud.
Pero, la investigación no para aquí. En el Centro Interdisciplinario de Investigación para el Desarrollo Integral Regional (CIIDIR-IPN Oaxaca), se llevan a cabo diversas investigaciones sobre agaves de diferentes edades y especies del estado de Oaxaca. Estas investigaciones se enfocan en el efecto prebiótico de los agaves, así como en el desarrollo de alimentos funcionales bajos en grasas y en el uso de agavinas como encapsulantes de otros compuestos benéficos para la salud. Todos estos estudios están orientados a la reducción del sobrepeso y la obesidad, pero eso te lo contaré después.
Para más información consulte:
Álvarez C.G., Leis T.R., Díaz M.J.J. (2023). Modulación de la microbiota intestinal. Uso de probióticos y prebióticos en pediatría. Protoc. Diagn. Ter. Pediatr. 1, 481–490.
Espinosa H., Urias J., Morales N. (2021). The role of agave fructans in health and food applications: A review. Trends Food Sci. Technol. 114, 585–598. https://doi.org/10.1016/j.tifs.2021.06.022
Santiago P., Mellado E., León, F., Dzul, J., López, M., García M. (2021). Fructans (agavins) from Agave angustifolia and Agave potatorum as fat replacement in yogurt: Effects on physicochemical, rheological, and sensory properties. LWT. 140, 110846. https://doi.org/10.1016/j.lwt.2020.110846
Dra. Ruth Esperanza Márquez López y Dra. Patricia Araceli Santiago-García I Instituto Politécnico Nacional, Centro Interdisciplinario de Investigación para el Desarrollo Integral Regional - Unidad Oaxaca, Oaxaca, México.
Fecha de publicación en línea: 8 de septiembre, 2025.
Citar este artículo como:
Márquez L.R.E., Santiago-García P.A. (2025). Agavinas, carbohidratos no digeribles que promueven la salud. Ciencia Cakotanú. 6(3), X–X. También disponible en: https://www.cienciacakotanu.com/contenido/artículos/v6n3-2025/agavinas-carbohidratos-no-digeribles-que-promueven-la-salud